Publicado: 15
marzo, 2016
Pinar
del Río concluyó cuarto en la etapa clasificatoria de la 55 Serie Nacional de
beisbol, y más que un puesto en la tabla de posiciones y su contrincante
inicial, a la conocedora afición de Vueltabajo le preocupa la cara que dejó el
equipo, previo a la postemporada del clásico cubano.
Los
más occidentales, primeros en llegar a las 50 victorias, pusieron un alto y
cedieron seis veces al hilo, luego lograron el triunfo y continuaron con
tropiezos.
El
picheo, principal arma de los vegueros durante el campeonato, mostró brazos
cansados en este último tercio. Los discípulos de Gallardo finalizaron con
efectividad de 3.24, guarismo que muestra un alza considerable, pues la mayor
parte de la campaña, el promedio fue inferior a tres.
Presenciamos
capítulos fatídicos en los que no aparecía el strike, y por lo general los
relevistas entraban fuera de picheo.
A
ello agreguemos decisiones del alto mando pinareño que, en el desenfado por
obtener el éxito, dejaba por demasiado tiempo a los lanzadores en el box,
y ahí llegaba el hit, incluso los extra-bases y por supuesto la balanza se
inclinaba a favor del contrario.
Aún
así, el staff de monticulistas pinareños continuó en la cima del
torneo, y lideró en ponches propinados con 487.
Madero
en mano, los nuestros terminaron con discreto average de 277, con algunos
hombres del line upregular como Lázaro Ramírez, Denis Laza, Yusniel Ibáñez
y William Saavedra por encima de 300. El inicialista además, presenta buenas
credenciales en impulsadas al sumar 63 y continúa en la vanguardia de los slugger del
país.
La
defensa sigue como asignatura pendiente, su rendimiento es de 973, por debajo
de la media del torneo.
De
modo general, Pinar del Río durante la segunda fase ganó 22 partidos y perdió 19,
ahora para el plato fuerte: los play off, la dirección del plantel debe
utilizar una estrategia más ganadora.
En
los play off, es borrón y cuenta nueva. Pinar como en anteriores campañas
luchará por ofrecer un espectáculo a la altura de sus resultados históricos.
Los serpentineros tendrán que hacer lo suyo. En los experimentados Yosvani
Torres, Vladimir Baños y Erlis Casanova , la afición tiene confianza. Además en
figuras en ascenso como Liván Moinelo, entre los líderes en salvamentos con 14,
Yaifredo Domínguez con nueve sonrisas y tres descalabros y Yohandy Cruz con
balance de ocho y dos en el año de su debut.
Ahora
urge un intenso entrenamiento durante el receso de la Serie, en todos los
órdenes del juego. Cuando se incorporen los nuevos vegueros alcanzar el acople
con la selección. El primer paso, adormecer con su humo a los cocodrilos que ya
durante el torneo han fumado tabaco.
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