El
Departamento de Agricultura pidió al Congreso 1,5 millón de dólares para que
cinco funcionarios adelanten a tiempo completo desde Cuba la logística que
permita incrementar el intercambio comercial una vez que el Congreso levante el
bloqueo impuesto sobre la isla.
“Esto
es realmente importante. Pedí al secretario (de Estado John) Kerry espacio en
la embajada” estadounidense en La Habana para estos funcionarios, dijo el
miércoles elsecretario de Agricultura, Tom Vilsack, durante una
conferencia organizada por la Coalición Agrícola Estadounidense por Cuba (USACC,
por sus siglas en inglés), una treintena de compañías agrícolas y alimentarias
estadounidenses a favor de anular el bloqueo.
El
funcionario admitió que levantar el bloqueo no será fácil, especialmente en un
año electoral, pero agregó que “en algún momento… tiene que terminar”.
Devry
Boughner Vorwerk, presidenta de USACC, consideró a la presencia de los cinco
funcionarios estadounidenses en la isla una “prioridad número uno”,
porque “necesitamos que estén allí permanentemente para comenzar a
dialogar con el gobierno cubano y nuestra contraparte sobre aspectos técnicos
de comercio e inversión”.
Vorwerk
dijo que la coalición enviará una misión a Cuba en abril con la meta de acordar
con los agricultores cubanos un diálogo continuo en las áreas de comercio bilateral,
producción, sostenibilidad, cadenas de distribución, inversión e investigación.
La
empresaria dijo estar “decepcionada” porque el bloqueo sigue en pie pero
“esperanzada” por la creación de un grupo bipartidista de trabajo en el cámara
baja y la presentación de varios proyectos de ley desde que su gremio celebró
un evento similar en enero de 2015. “Todos los caminos llevan al Congreso”.
Los
agricultores estadounidenses sostienen que el principal obstáculo para vender a
Cuba es una prohibición para extenderle crédito a la isla, la cual no
desaparecerá aún con las medidas ejecutivas adoptadas por el Presidente Barack
Obama para modificar las sanciones comerciales a Cuba. La ley estadounidense
aún prohíbe cualquier modalidad de crédito a los entes importadores del
gobierno cubano.
Las
medidas del 27 de enero dejaron intactas las limitaciones a las transacciones
internacionales en dólares por parte de Cuba, la posibilidad de las empresas
estatales cubanas de exportar a los Estados Unidos y las inversiones estadounidenses
en sectores distintos de las telecomunicaciones, entre muchos otros aspectos
que conforman el núcleo duro del bloqueo y mantienen pleno vigor.
El
presidente solo está limitado por la ley en cuatro puntos muy específicos, que
son permitir los viajes con motivos turísticos; la prohibición a subsidiarias
de EE.UU. en terceros países a comerciar bienes con Cuba; la prohibición de
realizar transacciones con propiedades norteamericanas que fueron
nacionalizadas, y la obligación a pagar en efectivo y por adelantado por las
compras de productos agrícolas. Obama tiene, por tanto, amplias facultades para
ir más lejos en el levantamiento del bloqueo.
La
senadora demócrata Heidi Heitkamp dio como un hecho que el Congreso no
levantará el bloqueo durante la sesión legislativa bianual en curso que
terminará el 31 de diciembre, por lo que propuso mientras tanto apoyar un
proyecto de ley de su autoría para no depender solamente de las acciones
presidenciales.
La
eliminación del bloqueo “no ocurrirá antes de las elecciones” presidenciales de
noviembre, dijo la senadora por Dakota del Norte. “Pero si podemos aprobar
leyes parciales de manera incremental, y no tener solo las medidas ejecutivas,
podremos avanzar”.
Heitkamp
y el republicano por Arkansas John Boozman presentaron en abril de 2015 un
proyecto de ley para permitir a los agricultores estadounidenses acceso al
financiamiento de exportaciones agrícolas a Cuba.
Estados
Unidos y Cuba reestablecieron el año pasado relaciones diplomáticas y
reabrieron embajadas tras las sanciones estadounidenses, que duran más de medio
siglo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario